La vida de los camioneros no es siempre tan fácil. Muchas veces están lejanos de propias familias para largos ratos de tiempo, y de vez en cuando tienen que encarar las dificultades con medios e instrumentos inadecuados. Sing Li, un camionero chino de 24 años, puede ser nombrado como camionero atípico, y seguramente mucho más desafortunado que otros colegas.
El joven, que tenía que recorrer 800 Km., tuve un pequeño incidente que había causado la rotura del cristal anterior de la automotora. Tenía que hacer entregas urgentes, así que sustituí el cristal con cartones y seguí haciendo entregas. Los medios de comunicación locales han referido que el joven guió con la cabeza afuera de la ventanilla.
Su inusual manera de guiar ha sido notada por la policía que, después de detenerlo cerca de Henan, en la China oriental, lo apresó para acusación de guía peligrosa. Sing en el momento de la detención tenía un ojo congelado y la cabeza azulada, seguía justificándose y explicando al juez que había violado el código de circulación solo porque no quería retrasar en su tabla de entregas.
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